La reforma tributaria del Alcalde Rojas

 Ideas para el debate. Primera parte.

Que la indignación por las regresivas tarifas de tránsito no oculten que el Alcalde Julián Rojas y el Concejo acaban de aprobar una lesiva Reforma Tributaria Municipal sin consultar con la ciudadanía bugueña.

 

¡Indignación! Eso ha provocado el alza de las tarifas de tránsito en Buga para el año 2021. Hay voces acusando al Alcalde, al Secretario de Hacienda, al concejal ponente, a los 17 Concejales y hasta al Personero Municipal, de la codiciosa viveza en favor del operador del tránsito. Hay voces convocando acciones de movilización ciudadanas. Otras están trabajando en acciones legales. Entre tanto, el Alcalde Rojas guarda silencio. Como que con él no es la cosa. En una orilla está el Senador uribista con cara de afligido pidiendo que ¡por favor! no lo acusen de ese exabrupto. Desde el Concejo sale el ponente a tratar de esclarecer la situación y la oscurece más, se volvió carne de memes en redes sociales.

Al respecto dos claridades importantes:

• Primero, lo más grave no son las jugosas tarifas de tránsito en favor del operador, que como dice el abogado Harold Moreno: con una acción legal se puede obligar al Concejo a que las ajuste conforme a la Ley (Ver). Lo realmente grave es que estas hacen parte de una Reforma Tributaria Municipal que se aprobó sin consultar a la ciudadanía bugueña y su realidad socio-económica después de un año de crisis sanitaria y económica. Reforma que tendrá profundas implicaciones y no precisamente positivas.
• Segundo, son responsables por esta Reforma Tributaria, incluida la viveza de las tarifas de tránsito, el Alcalde Julián Rojas que la propuso y el Concejo que la aprobó.

El pasado 23 de diciembre, mientras los bugueños se preparaban para disfrutar la noche buena, el Alcalde Rojas aprovechó la maquinaria que ha constituido en el Concejo para hacer aprobar una Reforma Tributaria mediante la actualización del Estatuto Tributario Municipal que estaba vigente desde el año 2008 (Ver). Con el nuevo Estatuto se ajustan las tarifas de impuestos –directos e indirectos–, tasas y contribuciones del ámbito municipal. Se afinan los mecanismos de liquidación de impuestos, recaudo, administración, fiscalización, penalización y control en materia tributaria. Se reglamenta la contribución por valorización, a la plusvalía, a la seguridad ciudadana y a la estratificación, entre otros asuntos nuevos. Se ajustaron las tarifas del Impuesto Predial y se acoge la política de catastro multipropósito, con la figura del “gestor catastral”, que abre la puerta para la privatización de los asuntos catastrales. De esta manera quedan listas las condiciones para que con la nueva actualización catastral se imponga en Buga un nuevo PREDIALAZO. ¡Ay del costo de vida en Buga!

Con la nueva Reforma Tributaria el Alcalde Rojas acoge voluntariamente, sin protestar, la política fiscal que ejecuta Duque por órdenes de la OCDE. La esencia del asunto es que el Estado Central viene recortando de manera sistemática las transferencias a los Municipios y en su lugar están promulgando Leyes para que los Municipios puedan aumentar los ingresos de recursos propios mediante nuevas responsabilidades tributarias a la ciudadanía. Mayores niveles de ingresos propios cubren, en parte, el recorte de transferencias y permite que los Municipios tengan mejores condiciones financieras para respaldar prestamos con la banca. La responsabilidad de pagar estos créditos recae en la ciudadanía, pero los beneficios es botín de unos pocos. Y mientras tanto Duque ya anuncia nueva Reforma Tributaria.

No se debe olvidar que el Concejo ya le autorizó al Alcalde un endeudamiento por 13 mil millones de pesos (Acuerdo 011 de 2020). Como es de esperarse los bancos que otorguen el crédito, o los créditos, van a la fija. La prenda de garantía consiste en comprometer un porcentaje de los ingresos más jugosos del Municipios: Predial e Industria y Comercio. Dada la voluminosa suma del empréstito, el porcentaje no será menor al 40% de cada uno. Aquí vale la pena recordar el último predialazo (2013), bajo la administración del hoy afligido senador uribista, que se utilizó para garantizar el pago de más de 12 mil millones de pesos de deuda. En esa oportunidad se empeñó el 45% del ingreso de Predial y de Industria y Comercio por 10 años.

En estas circunstancias, la Nueva Reforma Tributaria (Acuerdo 020), es un salvavidas para que la administración de Julián Rojas pueda cumplir con los compromisos políticos adquiridos, no con la ciudadanía que le votó, sino con los grupos políticos que lo apoyaron y con los que gobierna. Es la manera para que su proyecto político y el de sus aliados mantengan vigencia en las elecciones de Congreso y Presidencia del 2022. Y, por supuesto, para mantener aceitada la maquinaria para las elecciones locales del 2023.

La movida de la Reforma pudo salir impecable, sin ruidos en la opinión pública. Por lo menos hasta que los bugueños empezaran a sentir los efectos tributarios. Sin embargo, el Alcalde Rojas olvidó una sencilla pero profunda enseñanza de la sabiduría popular: la codicia rompe el saco. Como tenían la tranquilidad que genera el ambiente navideño, el respaldo de una mayoría en el Concejo que terminó siendo absoluta (Ver) y la ausencia de oposición que haga control político, le dieron rienda suelta a la voracidad y la codicia en beneficio del operador privado del tránsito. Hay afortunados y el operador del tránsito de Buga. El Alcalde y el Concejo implementan como instrumento de cultura ciudadana un esquema tarifario regresivo que les favorece. Todo para mejorar la movilidad en la ciudad. Nada más. ¡Cuidado! Que nadie piense algo diferente. Así lo demuestran las explicaciones del Concejal ponente (Ver)

De no ser por las libertades que se tomaron con el Artículo 378 del Acuerdo 020, los bugueños estaríamos sanos afrontando la nueva cuarentena y el Alcalde Rojas preparando los siguientes garrotazos gracias a la Reforma Tributaria. Como, por ejemplo, un nuevo PREDIALAZO. De todo lo anterior se concluye que el debate no se supera con la modificación del Artículo 378, como lo pinta el Alcalde y el Concejo, sino con la derogación del Acuerdo 020.

Sí la administración de Julián Rojas tiene un legítimo interés por el bienestar la ciudadanía bugueña y una preocupación sincera por la suerte de la Hacienda Pública Municipal, que solicite al Concejo la derogatoria del Acuerdo 020 y discuta con la ciudadanía una propuesta en materia tributaria y fiscal.

Ahora como eso no va a suceder sin la movilización social, resulta vital el ejercicio de control político ciudadano. Ante la ausencia de voces que desde el Concejo eleven la voz en defensa de los intereses de la comunidad, le corresponde a la ciudadanía actuar. De lo contrario, los codiciosos le causaran muchos dolores a este bello pueblo. Es cuestión de dignidad.